Mantener el entorno desinfectado es de suma importancia para preservar la salud. Con la propagación del nuevo coronavirus este concepto adquiere mayor significado y la luz ultravioleta cobra relevancia.
Esta tecnología, que se utiliza desde hace 40 años, aplicada a lámparas ejerce una importante función en la esterilización de los espacios agregando otra finalidad a la iluminación. De hecho, se ha convertido en un método habitual en hospitales, aviones y oficinas e incluso en el hogar.
La doctora Mabel Quéliz, especialista en Otorrinolaringología, explica que diversos estudios han demostrado que un instrumento de diodo emisor de luz ultravioleta profunda (DUV-LED) puede inactivar microrganismos, incluyendo bacterias, virus y hongos, pero los efectos sobre el SARS-COV-2 eran desconocidos.
“Estudios más recientes sugieren que la irradiación con DUV-LED inactivó drásticamente el SARS-COV-2 en un tiempo muy corto, lo que demuestra su efectividad”, sostiene la especialista.
¿Cómo funciona? La radiación UV destruye la capacidad reproductiva de los microorganismos debido a cambios fotoquímicos en los ácidos nucleicos. “En el país no existe regulación que exija este tipo de lámparas en los hospitales, sin embargo, en Estados Unidos y otras partes del mundo es obligatoria su colocación en los ductos de acondicionadores de aire para los quirófanos. Una clara indicación de que todas las bacterias y virus probados hasta la fecha (muchos cientos a lo largo de los años, incluidos varios quícoronavirus) responden a la desinfección por UV-C2”, explica Luis Sturla, miembro activo de la Sociedad de Ingenieros de Iluminación de Norteamérica (IES).
Uso doméstico
Cuando son utilizadas de forma cotidiana, las lámparas de luz ultravioleta pueden presentar un riesgo mínimo debido a que requieren protección para evitar lesiones en los ojos y la piel. “Pero existen modelos modernos de uso doméstico que incluyen sensores de aproximación y temporizadores, de manera que si un humano se le acerca a tres metros el equipo se apaga”, explica Sturla.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) aclara que no debe sustituirse por tecnología UV el acto de limpiarse las manos con gel desinfectante hidroalcohólico o lavárselas con agua y jabón, por ser el método más eficaz para eliminar los virus.
De interés
En la actualidad la tecnología ultravioleta es utilizada con éxito en los autobuses y el metro de Nueva York; en el hospital Mount Sinai y en la Clínica Mayo, en Florida.
Recientemente en el país el expresidente Leonel Fernández donó de 50 lámparas desinfectantes de luz ultravioleta al hospital Dr. Pascasio Toribio Piantini, del municipio de Salcedo, en la provincia Hermanas Mirabal, para los pacientes de Covid-19.